MELÓN, MELÓN

-¿Vos le rezabas siempre a San Jorge?
-A San Dimas, le rezaba…
-Aaah, es por eso entonces.
-¿Por eso qué?
-Que terminaste acá.
-Ah, tabién… Decime, si sos tan piola vos, ¿porqué no te salvó San Jorge?
-Me robaron la medallita en el bondi.
-Uuy, esta país está de última.
-Es lo que siempre decimos en casa con mi mujer. Al dia siguiente, le voy a afanar a uno… lo arrinconé, le tiré la frase, como siempre… “Dame lo que tengas de valor”.
-¿Y?
-Se le hinchó la vena, se le prendieron los ojos, se me vino al humo con todo. Nunca me había pasado. Se lo tomó al pie de la letra, se envalentonó y me dio para que tenga. Al toque cayeron las trullas derrapantes. Esa misma noche yo estaba dando el culo en la comisería, y dos días después acá.
-Porque no tenías la medallita.
-Porque no tenía la medallita.
-Y decimeee… vos no te habrás conseguido otra, ¿no?
-¿Medallita? No, si todavía… Che Juan, no jodás, no jodás Juan, dale, si somos amigos… ¡Juaaaaaaan! ¡Guardiaaass! ¡San Jorgeeeee!

No hay comentarios.: