UN ALIENTO

Después de ponerte redelacuquex el 31, de abrazar a todo el mundo y desearles la mejor, tirar cañitas y escuchar los enganchados de los Decadentes en la radio, después de todo eso, cuando te despiertes en el parquet pegoteado de sidra, rodeado de restos de pollo y aceitunas a medio comer, acordate: el sueño terminó, ya es 2009.

BANCAME UN TOQUE

…y casi todos los días voy a hacer el examen. Y sí, es un viejo amigo de la familia. Fue médico de cabecera de mis papás, de mis tios… es un capo. Cuando todavía existía el médico de cabecera, ¿no? Está con mal de Parkinson ahora, pobre. Sí, ya sé que una vez por año basta, pero me da no sé qué, aparte el consultorio queda a dos cuadras de mi casa. No, no me cobra nada, ni los guantes de látex. Es buen médico, eh, de los de antes… y de confianza. ¿Te paso el teléfono? Ah… Tabién. Cualquier cosa avisame, atiende acá por Flores, pero si querés va a domicilio también. Listo, listo… Yo decía por si querías alguien de confianza. Bueno, bueno… Nos vemos Julio, chau, saludos, eh, chau, chau.

EXTRA BALL

Descubrí que estas páginas son para mí una suerte de auto-autoayuda. Ni hace falta que me lean más. Acá es mi diván. Todo lo que me aqueja lo catartizaré sin reservas. Es más barato, y secretamente siempre quise ver al Lic. Goldman juntando cartones. Porque una vez le conté algo íntimo de mi ser y medio que se tuvo que aguantar la risa. Él se cree que no lo vi.

Ando precisando una dosis extra de testosterona. Sí, una que me ayude a enfrentar las vicitudes de la vida, que me agruese la voz, me haga crecer mucho pelo y músculo por todos lados y me aguce la vista para cazar los mejores culos, las mejores conchas y las mejores tetas.
Por eso, una de las tres cosas que le pediría al genio de la lámpara sería un tercer testículo. Nada demasiado farolero, ni siquiera tendría que ser compañero de los otros dos; podría salirme, ponele, en la pantorrilla, o atrás de la oreja. Lo deveras importante sería que bombeara hormonas masculinas 24 horas, a rabiar.

Lo malo es que las lámparas de aladino no abundan en este Buenos Aires gris y cansado. Me paso las tardes frente a las pizzerías de Constitución para ver si entre las chapitas incrustadas en el asfalto se han olvidado alguna. A veces me sorprendo, en cuatro, frotando algún pedazo de metal que se les parezca. Sé, porque me lo han dicho, que algunos colectiveros ansían durante todo el recorrido llegar a la estación, sólo para ver si me embocan cuando estoy con el culo para arriba. Hasta ahora, no ha sucedido ni lo uno, ni lo otro.

Podría revisar mi carpeta de spam, y ver si alguno que se llama Rempick S. Holmes me ofrece uno a buen precio. Podría transplantármelo, ahora las cirugías son tan accesibles… Pero debe doler, y la gente sabría, tarde o temprano, que no es original de fábrica. Podría ser un buen niño lo que resta del año y pedírselo a Santa Claus para Navidad, aunque no debe ser tan fácil de conseguir allá en el Polo Norte, y si para el 24 a las doce menos diez el tío todavía no lo consiguió, puedo terminar mis días con un huevo de reno en mis entrañas. Mala idea.

Mientras el genio no se me aparece entre humos y centellas, voy probando con algunas cosas: fumar negros y tomar mucha ginebra y café frío sin azúcar, tener un flete, hombrear bolsas en el puerto, trabajar en una carnicería, tomar unos vinos con Iorio.

Sé que algún día mi nuevo amigo llegará, y seremos felices para siempre, siempre juntos, aliados, conectados, listos para todo, y a partir de ese día no habrá más temor, ni dudas, ni cansancio, ni dolor.

Letra pequeña:
Bueno, dolor por ahí sí, imaginate, si te duelen DOS huevos, TRES debe ser pior.

LA POSTA

Quienes me conocen saben que siempre me meto en situaciones pintorescas, y que de alguna u otra forma sus fragmentos terminan salpicados en estas páginas.
Hoy, por primera vez, lo que voy a contar es TODO VERDAD. Me pasó el viernes en el colectivo. Sí, amigos: no soy un playboy literato, no vivo en Dubai y no tengo un harén con lo más selecto del puterío internacional. No me llamo Rubén y no tengo un Lamborghini Diablo. Soy uno más de los que viajan todos los días de un lado para el otro atrás del mango. Más de uno debe estar sorprendido y al borde del atonismo; recojan sus mandíbulas y sigan leyendo. [Seguir leyendo]

Dos meses atrás me gané un celular en una promoción. Lindo, con mp3, una cámara (lamentable la cámara, pero en fin…). Pasé a escuchar música en la calle después de mucho tiempo, ya que el mp3 ultrapedorrísimo-baratísimo-sinmarca-nosirvenipararrascarselaoreja y el discman sin-g-shock-ni-radio-tragapilasdelorto-descangayadísimo-apartenotengomascds no funcaban más hacía meses.
Siempre discreto y paranoico, mal lo sacaba del bolsillo para pasar los temas; para no llamar la atención, lo usaba con unos auriculares viejos pero pulenta que se escuchaban rebién. Como si eso fuera lo que ese día atrajo al ladrón. Seguramente fue mi justificada apariencia de buen pibe, cagón y mantequita (¿miento? gracias).

Lo debo haber visto en alguna propaganda de celular y se me pegó; estaba de un despreocupado buen humor y me tiré en un asiento casi al fondo (lo que nunca) a escuchar mis mp3 al solcito, pegado a la ventanilla. Faltaban unas veinte cuadras para llegar cuando se me sienta un chabón al lado. Mira para atrás y me dice algo que no entiendo, así que me saco el coso de la oreja.
-¿Este pasa en Parque Sabarasa*?
-Sí, pero te conviene bajarte y tomarte el subte porque da mucha vuelta.
-Ah, es que ando sin guita. Salí de la cárcel hace poco.
-Ah (glup)… bueno, te puedo dar para el subte.
Saco seis mangos del bolsillo, le doy cuatro.
-No tengo mucho, pero lo comparto con vos… (¿?)
-Soy de Villa Esparraguete**. Jodido… Ya me dieron un balazo, acá. Ahora ando armado. ¿Vos no sos rati, no?
-No.
-¿Seguro que no sos rati, no?
-(glupp) Noo, que voy a ser rati, no…
Abrió la parte de adelante de la mochila y mostró una culata negra. Es todo lo que vi. Ponele que fuera de verdad. Ponele que además tuviera un caño. Y balas y un gatillo. Ya dije que soy un gonca. No voy a repetirlo a cada tres líneas para que me humillen.
-Estoy con otro, está ahí adelante. ¿Sabés qué estaba pensando? Asaltarlos a todos, levantar una guita.
-No, no hagás eso, por favor… mirá, tengo cincuenta mangos, llevatelós.
-Hagamos así… dame los cincuenta y el celular y te vas a tu casa vivo…
-Listo.
Abro la billetera y le doy el de cincuenta; otros dos de diez se asoman. Los cheques ni los vio.
-No hagás bandera, pasamelá. Me mentiste, guacho.
-Estos son para volver…
-Te los dejo, sos buen pibe. Y sacale el chip al celular.
Desconecto los auriculares y salta Queen*** a todo lo que dá. No lo puedo parar, qué momento, ah, sí, botón Walkman, Volumen, no, Parar, ok. Abro la tapita para sacar el chip, ¿dónde está?
-Atrás de la batería.
-Sí, ya sale.
-¿Escuchás rock? A mí me recabe el rock. ¿Qué es eso?
-Es una... banda inglesa…
-Yo a veces me voy a uno de esos boliches de trolos… ojo, soy macho eh, voy porque me gusta la marcha…
-Sí, dicen que está bueno… (¿?)
Se mete el celular en el bolsillo y divaga sobre la vida difícil que llevó, las cosas que le pasaron. Tiene ojos verdes, una gorra, ropa normal. Diría que es lindo y que probablemente no fuma, no bebe, ni usa drogas. Toma sol. “Dentro de todo habla bien, es un buen pibe, la tuvo difícil”. Le tiro que “este sistema de mierda nos manda a todos al muere y no le importa si nos va todo para el orto” y cosas así. Le digo que está para más. Me pregunta de qué trabajo. Instalador de antenas****. Me dice que le consiga unas changas, para tirar cables, que está dispuesto a intentar. Que tengo cara de intelectual y que está seguro de que aprendería mucho conmigo.

Si todo esto fuera uno más de mis textos inventados, escribiría que me quiso poner un chupón mientras el colectivero, el chancho y tres viejas formaban una bella sección de cuerdas, los pasajeros bailaban y se abrazaban, y la máquina de monedas en vez de boletos daba celulares gratis. Pero me extendió la mano y me deseó suerte y compañía divina, y se lo retribuí. Tocó el timbre y se bajó con su mochila en la parada siguiente. Lo miré a través del vidrio. Él miró para atrás y para adelante, sin ningún sentimiento aparente, sin ninguna evidencia de nada. Pispié alrededor a ver si alguien a bordo estaba al tanto de lo que había pasado. Nadie. Cuando volví a mirar para afuera, había desaparecido. Tiré del auricular que tenía por adentro de la remera y lo enrosqué. Me bajé y me fui a laburar con el cable en la mano las ocho cuadras. Cuando llegué a la oficina, conté todo más o menos por arriba e hice lo que tenía que hacer. A la vuelta, un amigo me ofreció dejarme cerca de casa; le dije que a pesar de la decencia del señor caco gracias a la cual nada pasó a mayores, y que estadísticamente sería difícil que me asaltaran dos veces en el mismo día, hoy aceptaría volver en auto con el mismísimo Lúcifer en ropas de ballet con zapatillitas rosas en las pezuñas. Ya en casa, relaté los detalles a mis familiares mientras comía sin muchas ganas, y me puse a arreglar la persiana de la pieza mientras mi viejo y fiel celular tododescascarado-fuerademoda-windows311-sinjueguitosnimp3-nimemorystick-muchomenoscámara nuevamente cargaba baterías para enfrentar quién sabe qué aventuras. Ojalá que ninguna, qué chotos son los blogs de anécdotas de colectivos.

PD: Hablando de eso, La Arveja Negra vuelve a su programación habitual, y no volverá a contar anécdotas de la vida real a menos que a algún delincuente no asumido (porque eso es lo que sos) me atraque en un colectivo.

* No creerán que este lugar existe…
** No, tampoco.
*** No, esto tampoco es verdad. Lo que está con asteriscos no es, el resto sí.
**** Mentira. No vaya a ser cuestión que me empiecen a llamar lectores chorros que saben que soy fácil. ¡De acá!

MOMENTO CHIVAS: ¡AH, EL CINE FRANCÉS!

Buenas noches amigos, una vez más nos encontramos aquí en “Chivas y el Gran Cine”, con esta escenografía que simula un rollo de película con escenas sublimes del séptimo arte de todos los tiempos, esta planta deshidratada, tomá linda, tomá un hielito, y estos whiscachos que están a punnnto, ustedes no saben, con permiso… glup, glup, gluppp, tilíntlintínnn… aaaagh… Hoy nuestro programa está dedicado a criticar al cine francés. Hay un malentendido muy común por ahí que dice que el cine francés es muy variado. ¡Pamplinas! ¡Pocos cines son tan monotemáticos, todo igual y siempre la misma mierda! ¡Una película CALCADA de la otra! ¡CALCADA, aquí y en Pelotillehue!
Siempre hay una flacucha sin tetas que llora cuando se la cojen y fuma como una loca (tal vez Juliette Binoche o cualquier otra, las franchutas son todas iguales), un chabón muy narigón medio con barba y polera (podría ser un Jean Reno pero no necesariamente, son todos iguales). Hay tres o cuatro escenas así: cojen un rato, la mina no quiere pero bueeeh… después que el chabón acaba, fuman, clima de bajón, se miran mal en silencio y de pronto todo estalla en una discusión, muchas puteadas en francés, gran pelotera gran; ella se termina de arreglar la pollera, los aros, agarra la cartera y el impermeable, da un portazo, baja por un ascensor très chic y se sube a un 505 del importado (que allá es nacional, uno que tiene los faroles distintos, y menos baqueteado que los de acá). Medio que llueve. Se va a ver a una amiga para contarle lo que pasó, justo está el marido que le mira el culo; la amiga no se da cuenta y le relata algunas cosas fútiles, como que van a ir a Niza en el verano. El marido toma su café apoyado en el marco de la ventana. Y se lo mira. La mina se pone nerviosa y casi se le cae la taza.
-Ce qui se passe, Monique?
-Je dois y aller, je dois y aller…
Se sube de nuevo al 505 y vaga 2 minutos (de película) por París hasta que se hace de noche. Hay un par de escenas más, una donde el tipo la llama a la oficina y ella con la mano tapando el teléfono le dice que no lo puede atender, que se encuentren más tarde en un lugar (un nombre en francés, yo no sé francés, pero después me entero que es en un parque). Ahí viene cuando el quia medio que se despide, y se termina de repente cuando él se va y ella cierra la puerta del 505, se prende uno, lo mira irse y enciende el motor. La pantalla, como en todos los films galos (galos=franceses ;), no funde a negro ni aparecen los títulos encima, ni nada: corta a una pantalla negra con la palabra fin, pero en francés, pero corta como una patada en la nuca, como diciendo “Listo, terminó, te agarramos de sorpresa. ¿Cómo, nunca habías visto una peli francesa? Y bueno, nosotros no tenemos la culpa. Merci de venir. Reclame su baguette a la salida”. Ahí sí vienen los títulos, hay un tema con un acordeón, tipo nostálgico, etc. Después agradecen al Canal 5+, a todas las empresas que colaboraron, no es como en Hollywood que sobra la guita y a nadie le importa figurar, ni como acá que te agradecen hasta a Vieníssima por los panchos que se comieron los actores.
Resumiendo: si las cuentas no me fallan, el 87% del cine francés es así, otros 11% son pelis de policías donde persiguen a los ladrones en autos de tracción delantera, por lo tanto no colean, ni hay explosiones a granel, por lo tanto las persecuciones son un garronazo, y… ¿qué te iba a decir…?
Ah, el 2% restante son las de Asterix, Amélie Poulain e Delicatessen, que ya es un tema aparte, ni parece cine francés.
Bueno, amigos, esto es todo por hoy, hasta la semana que viene con más crítica de cine, la próxima tenemos “chinema ittalianno”, donde repasaremos la obra de Fellini, entre otros. Adriano Celentano, La Cicciolina... Hasta entonces… … … … Chau, hasta entonces…
¿Alguien me sirve otro? Están gasoleros últimamente, eh. Puro hielo… Y sí, yo intenté disimular un poco, vos viste que dije, “mmmm, que whiscacho”, ¿qué voy a decir, esto parece agua de la canilla? Dale, ahí, un poquito más… listo, listo. No, tampoco soy un alcohólico, aparte voy a manejar. Sí, voy al estreno de Los Bañeros XIV. Por laburo, a mí el cine nacional ni me fú ni me fá. Pasa que viene el verano y la gente quiere saber si la peli se deja ver. Gracias, Tito… ¿Te parece que fui muy duro con los franchutes? No, ¿no? Tabién. Y si son todas iguales. Que me chupen un huevo. Yo mi opinión no la vendo. Aparte el franco con esto de la bolsa debe estar por el piso.

DENSERIO

¿Dale que el cuchillo te cosía la carne de nuevo, que las venas le chupaban tu sangre al piso de la cocina y que otra vez me decías todas esas cosas horribles?
¿Dale que yo no me quedaba horas arrodillado al lado del tacho, la pala y la escoba, que no te pedía a los gritos que volvieras aunque fuera para pedirte perdón?
¿Dale que de acá a unos años no me visitaba en el psiquiátrico el guionista ese de nuestra película, dale que no aparecía al principio “basado en hechos reales”?
¿Dale que todo esto lo inventé nada más que para el blog? ¿Dale? ¿Dale?

(Mala semana para que me lean mis allegados o para que les pase algo en la cocina; cualquier cosa, yo no fui, ¿dale? Dale.)

MELÓN, MELÓN

-¿Vos le rezabas siempre a San Jorge?
-A San Dimas, le rezaba…
-Aaah, es por eso entonces.
-¿Por eso qué?
-Que terminaste acá.
-Ah, tabién… Decime, si sos tan piola vos, ¿porqué no te salvó San Jorge?
-Me robaron la medallita en el bondi.
-Uuy, esta país está de última.
-Es lo que siempre decimos en casa con mi mujer. Al dia siguiente, le voy a afanar a uno… lo arrinconé, le tiré la frase, como siempre… “Dame lo que tengas de valor”.
-¿Y?
-Se le hinchó la vena, se le prendieron los ojos, se me vino al humo con todo. Nunca me había pasado. Se lo tomó al pie de la letra, se envalentonó y me dio para que tenga. Al toque cayeron las trullas derrapantes. Esa misma noche yo estaba dando el culo en la comisería, y dos días después acá.
-Porque no tenías la medallita.
-Porque no tenía la medallita.
-Y decimeee… vos no te habrás conseguido otra, ¿no?
-¿Medallita? No, si todavía… Che Juan, no jodás, no jodás Juan, dale, si somos amigos… ¡Juaaaaaaan! ¡Guardiaaass! ¡San Jorgeeeee!

SOLTÁ EL BRILLO, SOLTÁ LA BELLEZA

Un día, a partir de cierto día, el tiempo nos viene a apurar mal. Todo lo que nos pertenecía lo tenemos que soltar, de a poquito, porque atrás vienen otros que lo precisan. Como si hubiese una cantidad limitada de juventud a repartir entre todos los mortales.
No hay pausa en el proceso; cada minuto, el guacho nos hace la vida de a gotitas, chafiándonos lo que nos resta de poder, birlándonos lo que tenemos de más precioso. Como en arenas movedizas que cuanto más pataleás, peor te va, hay que dejarse llevar, nuestro destino es uno solo.
Otrora, adolescentes que éramos, embriagados por los posters de Bon Jovi, el recuento de granos y el olor a pedo de hamburguesa, nunca nos hubiéramos imaginado arañando desesperadamente lo que nos queda, no para no irnos, sino para que sea digno y para que alguien se acuerde de nuestro paso. Qué triste.

GOOGLE, MAÑANA (FLASH DE TN EN LA RURAL)

-Se acerca la era donde para entrar en la internet no hará falta ni saber leer, ni saber escribir. El sujeto se parará frente al dispositivo y lanzará su pregunta. Estamos aquí en la Feria de Ciencias y Tecnología de La Rural examinando el prototipo de lo que será el Google de acá a dos años, y para ello contamos con la presencia de su creador, el licenciado Mamerto Díaz. Buenos días, señor D… cof, coff ¿cómo le va, Mam…? Coff, ejemm… Bueno, dejemos las presentaciones a un lado, vamos directamente a la demostración. Tenemos un pequeño y selecto grupo de televidentes semianalfabetos que siempre miran nuestro programa, y que ganaron el concurso para salir en TV hoy aquí enn La Rurallll… Por acá, señor… No, mirando al aparato… eso… Ahora diga lo que anda buscando y la máquina… levá… a responderrr.
-Todos los negocios quel dueño se sacó la lotería y que les pusieron el número que ganaron como nombre del negocio. Yo quiero saber porque me dieron un billete de cinco falso en un polirrubro que no me acuerdo cómo se llamaba, pero era un número, y seguro que el dueño le puso ese nombre porque se ganó la lotería y se puso el kiosko con la guita.
-Muy bien, espere un segundito nomás que ya le sale el forrrmulario continuo con todos los negocios.
-Pero…
-Era unnn chiste, jejé. La máquina le graba un devedé connn todas las direcciones y usted lo reproduce en su televisorrr. El que sigue…
-Yo quiero saber sobre trolas cerca de Quilmes que me alquilen el marrón por hasta quince pesitos la hora.
-Perrrfecto. Un momentito… Acá tiene, ellll que sigue.
-A mí me gustaría la receta del pesheto fractal entremechado, ese que son varios peshetos uno adentro del otro hasta el infinito.
-Un momentito, señora… la máquina está procesanndo… muy bien…
-Gracias, joven.
-De nada. Cuéntenos un poquitito, Díaz, cómo surgió la idea de este, no sé cómo se llamaría… ¿dispositivo…?
-Es un buscador.
-Este dispositivo buscador de interrrnet por vía oral, ¿no es cierto?
-Sí, no hace falta escribir nada para optener las informacciones. La prósima etapa va a ser un aparato que diretamente adivine su pensamiento, para aquellos analfabetos que además son mudos.
-Pero qué maravilla, cómo avanza la ciencia. ¿Eso significa además, derechos iguales para todos, independiennntemennnte de capacidades ó discapacidades?
-Sí, también. Lo que busco yo con mi investigación es la igualidad del ser humano.
-Este buen hombre me ha dejado sin palabras. Estudios centrales.

EL DÍA QUE PACHA MAMA DIGA “EL INFIERNO SOY YO”

Ese día, las almas de los pingüinos empetrolados volverán al mundo material y juntarán a los humanos en corrales donde se les insertarán por el ano, uno a uno y sin interrupción todos los tenedores de plástico, cucharitas, vasitos de tergopol, tetras vacíos, bolsitas de supermercado usadas en vano, chicles, pilas da varios tamaños, un teléfono de baquelita del año 36, los suplementos de los diarios que tiraste sin leer, chapitas de gaseosa y otros items contaminantes; todo esto EN VIDA, ya que no se trata de un infierno en el sentido religioso de la palabra, sino de una rebelión natural, del coletazo de un bicho herido y ultrajado que ya no se conforma con que todo vuelva a ser como antes, y quiere venganza.
Después de ese período de transición, los humanos serán libertados y usarán pañales (de los que se lavan) por cien millones de años hasta que Charles Darwin se encargue de cerrarles el culo nuevamente.

CARNE SOBRE CARNE

Su cuerpo rebotaba convulsivamente, tal vez no de placer y sí porque la media res estaba más que congelada y quemábale la piel. Luego de que Ricardo saciara su furia sexual, Carmencita hizo su pedido: “Marcame”. Entonces, el carnicero sumergió su miembro en el balde de tinta violeta, le dijo “date vuelta” y procedió a ponerle su marca, una R y una C subrayadas. Las sopló un poco y les echó viento con una planilla ensangrentada. Las apretó con el dedo para ver si se le pegaba el violeta: se habían secado. Carmencita era una chica RC.

BOLUDOS SÍ

Guión para OTRO corto independiente protagonizado por Eduardo Blanco (Raúl) y Osvaldo Santoro de traje cremita, corbata marrón y maletín (Francisco).

Interior, noche. Subte línea C. Tropezón.
-Disculpemé, lo pisé…
-No, no es nada…
-Qué boludo…
-No hay problema.
-Ojo, ni más ni menos boludo que usted.
-¿Cómo?
-¿Ve? Soy un boludo. Disculpemé, no fue mi intención llamarlo así.
-Grrmm…
-Pero el ser humano es medio… “así”, por no decir MUY “así”; es lo que nos diferencia de los animales.
-Tal vez sea un problema de manos chicas…
-Jejejejj, esa la sabía, sí. Pero no, la boludez la llevamos en el alma… ¿Le puedo hacer una pregunta?
-Dele…
-¿Usted creía en la budinera?
-¿Qué?
-La budinera, esa que se ponía en un palo para enganchar los canales de cable.
-Ah… sí, claro. Yo no la puse, pero funcionaba, ¿no?
-Nooooo, ¿ve? ¿Y en Walt Disney, usted cree?
-Claro, cómo no voy a creer.
-¿Sabía que era satanista y del Ku-Klux-Klan?
-No me diiiga…
-Sí. Y fumaba crack.
-¡Qué sorpresa!
-Bueno, es así. Y nosotros, LOS BOLUDOS, nos creemos lo que nos venden. Lo importante… lo importante es SABER de nuestra boludez. Con eso ya tenemos por lo menos un hilo de salvación. HAY QUE RECONCILIARSE CON EL BOLUDO INTERIOR.
-Sí, bueno, yo me bajo en esta. Un gusto, eh…
-Tome, le dejo un folletito de Boludos Sí.
-Gracias.
-A usted…

Cuchún Cuchún Cuchún Cuchún Cuchún Cuchún ZIIIIIIIIIIJJJJJJZZZZZZ JIIIIIIIIIIZZZZZJJJJJJJ Cuchún Cuchún Cuchún Cuchún Cuchún Cuchún

-Uuy, disculpemé, lo pisé…
-Está bien, no fue nada.
-Usted va a pensar que soy un boludo…

MARÍA Y ENRIQUE

Además del olor a patas, a culo, a vino y a sábanas pringosas, flotaba en el aire la sensación de que algo no estaba del todo en su lugar. Al contrario de otras veces, cuando Sheyla mostrábale ausencia y falta de interés, Enrique percibió un cierto nerviosismo mal disimulado en sus manoseos esa tarde. Cuando se le acostó al lado en vez de irse a baldear la chucha con permanganato, le vino como un frio en la espina. Buscó alrededor, desesperado atrás de los puchos. Seguro que le iba a decir que estaba embarazada, o que tenía sida. Seguro, se la venía venir. Manoteó el pantalón al lado de la cama, ganó el paquete y los fósforos sin sacarle los ojos de encima, miedo a que le clavara las palabras por la espalda. Prendió uno y sacudió el fósforo una vez, sin dejar de mirarla. Fumó y la observó largo rato; nada dejaban transparecer las facciones severas de muchacha del campo, sólo (y sólo tal vez, allá en el fondo) un atisbo de preocupación sobre cómo Enrique iba a reaccionar. Ni eso.
Enrique habría comparado su expresión vacía con un signo de interrogación, si hubiera sabido lo que eso significaba. Prefirió darle en su cabeza el nombre de “cara de nada”.
En ese instante, ella le pedía el pucho con una seña; él se lo acercó a su mano súbitamente temblorosa. Pitó hondo, como para cobrar coraje, miró a través de las cortinas del cuartucho y desistió de revolver en las palabras:
-Te quiero, Enshique; ievame con vó.

LAS EDADES DEL NIÑO

por el médico pediatra Jorge Alberto Cascagnari (Dr. Jorge)
Hablaremos este mes de las edades del niño, ese flagelo que nos toca a todos: padres, hermanos, vecinos, maestros, pediatras, bueh… la lista es interminable. El peluquero quel pibe no se le queda quieto en la sillita esa, en fin… Vamos a los números.
Al nacer, estas criaturas nos sorprenden a todos con sus gritos pelados y apariencia general de ranas. Esto es NORMAL.
A los seis mesesitos, empiezan a comer papillas y a embarrarse de lo lindo, después de todo es la ley de la Naturaleza: entra por aquí, sale por allá, y cómo sale, faaaaaaaaa, se-la-regalo, señora… A esta edad también gatean y se llevan todo a la boca; es la fase de recolección de anticuerpos. Se dice que entre los seis mesesitos y el año, 75% del peso corporal del niño son ácaros y anticuerpos de toda clase.
Al añito se paran solitos y empieza la joda. Aaaaaaamigo… que te toco esto, que te tiro lo otro, que te rompo lo de más allá. Te miran y parece que te porfían, los turros. Los pibes no paran, ENE-O PE-A-ERRE-A-ENE, NO PARAN. A esta edad ya son concientes de sus actos y pueden ser castigados. Una frase aleccionadora puede ser “Si sos TAN CARADURA de andar por ahí caminando y rompiéndome las cosas, te va a gustar arrodillarte en estos garbanzos que trajo tu bisabuelo de España.”
A los dos añitos, tiran comida al piso y le bailan encima, sueltan improperios si no se les lleva la corriente, y piden todo lo que ven. También aprenden que los gases y los eructos pueden ser usados como gracia para impresionar al otro.
A los tres, ya nos hacen pasar vergüenza a lo grande: “¿Pero cómo, papi, si vos dijiste que la tía Emilce era una reventada…?”
A los cuatro, piden esos juguetes caros que ven en las propagandas de cable: el más baratieli es la pista de coches con lavadero.
A los cinco, repiten como endemoniados la frase “¡Tiene nata!”, como si no hubiera otra en el mundo. Y no quieren ir a la escuela, por más anécdotas ejemplificadoras de Sarmiento que los papis les cuenten.
A los seis y siete años, hacen preguntas obscenas como “Má, ¿los corazones tienen patas?” y otras de ese estilo. Ya miran el pitito como de reojo.
Hasta los diez transcurre todo más o menos normalmente, escuela, amiguitos, etc, hasta que descubren el pito. Aaaaaaah mi dios, y no lo sueltan, eh… nononooononoo. Esta conducta se repetirá hasta la edad adulta, con la variante que más tarde le pedirán a otros u otras que le agarren el mencionado pene.
Bueno, obviamente este es un resumen muuuy resumido, faltó tocar un montón de temas, el falso crup, las vacunas, el repelente de mosquitos, pero seguramente el próximo mes, si no me cancelan el registro (¡toctoc!), nos veremos de nuevo tratando los temas que nos conocerán mejor a nuestros críos.

LIBRE (POESÍA)

Libre es el colectivo cuando ya subieron todos
Libre es el taxi cuando no se subió nadie
Libré es libro en francés
Libre es el escape de la moto que me despierta
Libre es la revista que más me gusta
Libre es el tenedor por cinco con cincuenta

LOS POST IMPUBLICADOS (E IMPUBLICABLES) ENCONTRADOS EN EL ALTILLO DE RUBÉN

Mientras se me ocurre algo más de la saga de cuando Rubén se murió, sigo publicando cosas inéditas en internet de nuestro recordado ídolo. M.

POST QUE VIENE A CUENTO POR EL TEMA DE LOS DESPERTADORES, NADA QUE VER CON LA MUERTE DE CASTRILLO

-Hola… ¿Cuánto es el despertador?
-¿Qué desp… ah, ¿esto?
-Se…
-Aaah, esto no es un despertador. Te cuento… vení, acercate.
-¿?
-No le digás a nadie, eh. Yo te lo cuento porque siempre te veo pasar. Aparte sos repotro, sos.
-Sí, bueh. Gracias. Tá, ¿cómo es el tema?
-Acá nos pagan para que tengámos esto en el puesto, pero no son para vender, son para hacer ruido, parece.
-¿Pero quién les paga?
-No sé, nadie sabe. Vienen en una combi negra todas las madrugadas. Nos dan cien peso… yo ya me hice la cas--
-¡LO SABÍA! ¡LO SABÍA!

UNA PAUSA

Trees lapisera por un piiissoooo… Trees lapisera por un piiissoooo…

TIRIRIRITT- TIRIRIRITT-TIRIRIRITT
TIRIRIRITT-TIRIRIRITT-TIRIRIRITT

Trees lapisera por un piiissoooo… Trees lapisera por un piiissoooo…

TIRIRIRITT- TIRIRIRITT-TIRIRIRITT
TIRIRIRITT-TIRIRIRITT-TIRIRIRITT

Trees lapisera por un piiissoooo…
Trees lapisera por un piiissoooo…

TIRIRIRITT- TIRIRIRITT-TIRIRIRITT
TIRIRIRITT-TIRIRIRITT-TIRIRIRITT

Trees lapisera por un piiissoooo…
Trees lapisera por un piiissoooo…

TIRIRIRITT- TIRIRIRITT-TIRIRIRITT
TIRIRIRITT-TIRIRIRITT-TIRIRIRITT

Shiba présio, shiba galidáaaaa

TIRIRIRITT- TIRIRIRITT-TIRIRIRITT
TIRIRIRITT-TIRIRIRITT-TIRIRIRITT

Trees lapisera...

TERMINÓ LA TANDA (PARA QUE SE UBIQUEN)

-¿Y cómo está la situación allí en el velatorio de (hojea unos papeles) Rubén Castrillo, Moncho?
-Bien, Chiche (porque era el programa de Chiche Gelblung), el personal de la casa… velatoria continúa organizando las filas… de admiradores que siguen llegándose hasta aquí… ya son cerca de las 23… son cerca de las 23 horas, digo, y no para de llegar gente. Vamos a intentar hablar con la gente… que se acerca y con los… organizadores… hay un pequeño tumulto…

¡¡¡Castriiillo, Castriiillo, Castriiillo!!!

-Vemos… vemos, unos metros después del vallado... varias colas separadas por esos… cordones que hay en los bancos… nos acercamos al personal… de seguridad… la marea humana es impresionante… buenas noches… ¡buenas noches! ¿qué son estos cordones?
-Estamos separando la gente acá… pasá, ¡pasá! Vos no, allá, allá. ¿Quién sos vos? Allá. Estamos separando los familiares, amigos, admiradores... ¿Cómo le va, don Cóppola? La suya es allá, donde dice “de cagar con la puerta abierta”, allá, sí. Buenas… ¡Lic. Lotito! Allá, ¿ve ese cartel?
-Estoy sin los espesheti, ¿adonde?
-Es la segunda cola a la derecha, donde dice “como chanchos”…
-Ah, aquella.
-No, esa es “culo y calzón”, al lado… Metasé donde pueda.
-Gracias.
-De nada ¡Ustedes, el populacho, por acá! ¡Beto, abrí la 2! ¡La 2!

-Bueno, veo que está bastante ocupado…
-Vamos a cerrar, sr. Periodista, ya no cabe más gente. ¡Cortá, Beto, usá la manguera!

-¡Pero esta gente ya está toda mojada!
-¡Usá la presión, Beto, la-pre-sión, así se van para afuera! ¿Adónde hiciste el curso de patovica vos?
-Listo, te copié.
-Lo siento mucho, señor…
-No me haga eso, tengo que hacer esta nota sino me rajan. Tengo dos pibes y el cámara que vive en casa...
-Hay dos lugares en “comentarista”, separamos dos y no vino nadie. Puede entrar.
-Listo. Seguime, Cacho, vení… estamos dejando el foyer… donde hay algunas… decenas… (¿Por qué los noteros hablan así, alguien me aclara este punto?) de computadoras donde se pueden revivir… los ingeniosos textos de Castrillo, así como fotos de familia que sus viudas han dado a conocer a los fans… entre los cuales me incluyo... NOS incluímos, acá Cacho siempre lo seguía, también. Son las diez y media de la noche…
¿once menos cuarto? once menos cuarto… y afuera llueve… como la última vez… nosotros vamos ahora… a entrar a la sala… para la ceremonia. Seguimos desde allá. Chiche…

-¿Pero estos pelotudos no tienen otra noticia hoy? Son todos unos repelotudos acá… Vos también. ¿Quién es ese Castrilli? Por el amor de Dios… Vamos a una pausa.

TANDA

Interior. Noche. Sofá de uno televidente cualquieras.

…en fin… estudios centrales.

-Qué loco eso del blorg, blorg… ¿cómo se llama eso?
-¿Qué decí?

Vamos a una pausa, enseguida volvemos.

-Nada.

-Qué bajón, mañana ya es lunes.
-Sí, dos días no alcanzan...

-Che negra, andate al kioko y traete una Quilme.
-Dame plata.
-Tomá, cuando volvá te parto esa boca…
-Siempre me decí lo mimo vo, ¿no tené otra idea, eh?
-Sí, cuando volvá te digo la idea que tengo; andá, negra culo susio…
-Ya vengo.

La mujer se pone los cinco mangos en el shor y gira sobre sus talones; las chancletas con la banderita de Brasil se arrastran sobre las baldosas. El perro la sigue y quiere upa. Se siente ruido de llaves en la puerta de calle.

-¿Qué tal Pochi?
-Bien, voy a comprar una Quilme, ya vengo… Vení, Quesito... ¡pero qué perro de mierda, le abrís la puerta y se escapa!

El hombre con la pierna enyesada toma el teléfono y disca unos números. Llama…

-Holá, Don Rubén…
-¡No digas nombres, pelotudo!
-Salió todo bien.
-Ya sé, estoy viendo el noticiero también, llamame después.

ÚLTIMO ADIÓS AÚN GRANDE

-Seguimos atentos a la repercusión del fallecimiento del ídolo máximo de los internautas; estamos en la Casa Fiambretti, en Olivos, y hay un dato muy curioso que tal vez muchos porteños no sepan: hace años, los hermanos Osvaldo y Abel Fiambretti compraron un antiguo teatro en la avenida Maipú, y a pedido de Rubén Castrillo lo convirtieron en la sala velatoria donde hoy nos encontramos. Cuéntenos un poco más de esto, Fiambretti…
-Es verdad, una noche estábamos comiendo en lo de Pepe Fechoría, y Castrillo en esa época había agarrado unos mangos con eso del AdSense y no se qué, yo no entiendo mucho de eso, ahí me dice “Osvaldo, conseguime una pirámide de tres ambientes, algo simple, como mausoleo…”
-Como un faraón.
-Sí, Rubén era un grande. Tenía esa pizca de megalomanía que solamente los artistas de verdad tienen. Le dije que pirámides-pirámides para morirse acá no había, pero que podíamos encontrar algún lugar a su altura, y fue así como encontramos este teatro, que fue un teatro underground antes de que existiera el underground.
-Y sí, Maipú al cuatromil no es un lugar MUY céntrico.
-Sí, pero fijate vos qué interesante, este teatro fue construído como teatro presidencial durante el gobierno de Perón, que sería lo que sería pero le dio como calor hacérselo dentro de la quinta de Olivos, entonces lo levantó acá, para no tener que irse hasta el centro.
-No como ahora, que nos la ponen como quieren y no se les mueve ni un pelo.
-Exactamente, tiranos eran los de antes. Yo le puedo nombrar un Hitler, un Mussolini, un--
-Jeje… Bueh, cuéntenos un poco cómo está equipado este mausoleo.
-Hagamos así, lo dejo acá con mi hermano Abel que yo me voy a cambiarle los cubitos al Rúben.
-Gracias, Osvaldo. Buenas noches, Don Abel.
-Buenas noches, encantado de estar acá. Bueno, tenemos acá arriba las habitaciones donde se prepara a la persona para su viaje por otros mundos, que eran los antiguos camarines.
-Veo que todas las puertas tienen una estrellita y el nombre “Rubén”.
-Así es, las instalaciones nunca tuvieron la función de mausoleo y tampoco serán usadas por otras personas para este fin; únicamente el Sr. Castrillo “usufructuará”, por así decirlo, el predio del ex Teatro Justicialista.
-¿Quiere decir que va a ser sellado como una pirámide?
-En realidad, habrá un personal que cuidará de la cápsula criogénica 24x365.
-¿Castrillo fue congelado?
-Efectivamente. Era su deseo.
-Debe ser un servicio muy costoso.
-Es un servicio caro. Hay unas empresas coreanas ofreciendo planes por la mitad del precio, pero son solamente 12x365, si es que usted me comprende…
-Perfectamente, las veces que me habré cagado encima por culpa de un yogur…
-¿Ve? No vale la pena. Y estamos hablando de su pasaporte a la eternidad. La Fiambretti Hnos. le ofrece lo último en criogenia, pero LO ÚLTIMO, llame ahora, 0800-3333-FIAMBRETTI y--
-¿Tienen otros clientes famosos?
-Muchos. ¡Tenemos mausoleos criogénicos en varios puntos de la ciudad, cerca de los lugares que lo vieron crecer y le trajeron alegrías en vida!
-¿Hay planes para quien no puede gastar mucho?
-Hay un plan para cada bolsillo, a partir de 1500 pesos por mes. Tenemos de cuerpo entero (Full) y por pedazos, como Patalín, Escuchame un poquito, Banana Gelatta, y muchos más.
-¡0800-3333-FIAMBRETTI!
-¡0800-3333-FIAMBRETTI!
-Gracias, Don Abel, que sigan los éxitos.
-Encantado.

-Vamos a entrevistar ahora al pueblo que se acercó hasta aquí a despedirse de su ídolo. ¿Cómo te llamás?
-Andrea.
-¿De dónde venís?
-De Munro.
-¿Cómo vivís esta situación, Andrea de Munro?
-Mirá, es muy triste… Dicen que los buenos se van primero.
-¿Tu bronca es específicamente contra los miles de adolescentes que llenan la internet de basura?
-Mbbww… msnff…
-Decilo, Andrea, sacalo afuera.
-Mmmmmbwaaahhh… ffffgggg… mwbbbmmmm-m-m-mhh…
-Gracias por tu testimonio; vos, ¿cómo te llamás?
-Daniel, de Olivos. Quería decir que estamos organizando una protesta masiva con incendio de automóviles y rotura de vidrieras, todo acá en Olivos, menos en mi negocio porque lo remodelé hace poco y todavía lo estoy pagando.
-¿Dónde es la concentración?
-En la puerta del teatro, a las once y media. Traigan palos y kerosén.
-Gracias, Daniel. Como se puede observar, el pueblo manifiesta su pesar, cada uno a su manera, algunos llorando, otros destruyendo propiedad ajena… pero todos, TODOS SIN EXCEPCIÓN recordando los buenos momentos que nos hizo pasar este GRANDE, esta figura BRILLANTE de nuestra farándula. En fin, estudios centrales…

GRAN PESAR EN EL MEDIO ARTÍSTICO: CASTRILLO SE COME UNA BANANA ENVENENADA Y CREPA PARA SIEMPRE

(Comienza TN sin música)
-Buenas noches, César.
-Buenas noches, Mónica. Es una manera de decir. Con gran pesar informamos que el principal escritor de lo que se ha dado en llamar el fenómeno más grande en la internet de los últimos años, La Arveja Negra, ha perdido la vida hoy en un accidente. Desde el lugar de los hechos, nuestro cronista Santiago Mamertini:
“Gracias, César. En el transcurso de una de las “performances” de Castrillo en las instalaciones de Canal 13, el brazo armado del Comfer se sumó al “evento” enviando una negociadora equipada con un cesto de bananas maduras, con la intención de cambiarlas por su rehén, la ex modelo y conductora de TV Patricia Miccio.
Luego de que Castrillo accediera al cambio y como remate del “incidente”, éste se habría comido una de las bananas que habrían sido inoculadas con sedantes para dejarlo fuera de combate. Como todo esto habría sucedido a ciento treinta metros de altura, el bloguero habríase desmayado, cayendo en el patio donde estacionan los móviles y feneciendo en el acto.
Tanto la conductora como la negociadora de las fuerzas de seguridad del Comfer gozan de buena salud, sobre todo esta segunda, porque Patricia Miccio es muy flaquita, no sé, para mi gusto. Un movilero y un camarógrafo que salían a hacer una nota recibieron heridas de escasa consideración causadas por pedazos de concreto y hierros retorcidos que habrían salido proyectados de lo que hoy es el cráter que habría abierto el cuerpo de la ex celebridad de internet.”
-Por el momento no hay más informaciones del hecho, gracias Santiago. Una tragedia, realmente, ¿no es cierto, Mónica?
-Sin dudas, un país entero de luto. Cuánto talento tenía ese hombre, y cuántas cosas para dar.
-Y para devolver… nosotros le habíamos prestado un sacacorchos una vuelta, ¿no? Cuando él vivía en San Pedro.
-No fue exactamente así. Él saltó la medianera y se metió en la cocina--
-Y abrió el cajón de la mesada. Ahora me acuerdo. Dijo que golpeó y no le contestaron, y que la cocina estaba abierta. Un gran tipo, Castrillo…
(silencio)
-Seguimos con otras noticias, caos en el microcen—

-Juro que me las pagan…

¡UTILÍSIMA!

-Buenas tardes, amigas, estamos aquí con el famoso bloguero Rubén Ceferino Castrillo, que nos enseñará a alimentar a 20 personas con un pollo congelado.
-Como Jesús en su mejor época.
-¡Jajajajj, qué ocurrente, un saludo a la Liga de Madres del Señor, que nos ven siempre!
-¿Podemos empezar, Patricia?
-Claro, adelante, yo me hago a un lado así Rubén nos explica su “milagro”, ajajajj.
-Bueno, primero quiero dedicar este plato, (o “estos platos” porque acá da para comer una semana) a toda la gente de Corral de las Vinchucas (si nos habremos comidos polladas allá, aaaaaaaaaaaah…) al Vándalos Moto Club, y a todas las chicas de Xtasi´s. Y por qué no, a las viejas desocupadas de la Liga de Madres.
-¡Saluditos, jé!
-Bueno, lo primero sería descongelar este fino batracio a baño María en una cazuela de barro dentro del microondas, y éste dentro de nuestro horno eléctrico Bosch embutido en esta cocina de mentira y ciérrenme las puertas del estudio para que no entre chiflete, eso para no alterar la textura de las carnes del animal. Usted, señora, que capaz que no tiene ni un calentador a querosén, lo puede ubicar con cariño arriba de la medianera del vecino durante cuatro o cinco horitas, pero nunca en las chapas, pues se arrebataría.
-Castrillo, usted no era tan religioso…
-Callate, mami.
-¿Y cuánto tarda esta primera parte?
-Tres horitas y media, por eso le pedí a la gente de videoteip que nos prestaran una de romanos de Tintillo Brass, así la miramos y la comentamos juntos mientras se le va el frio al pollerli. Ahora empezamos con el baño María… que no es lo mismo que acabar con María en el baño... je… ahí está… y nos tiramos en el sillón a ver la peli. ¡Vení chuchi!
-Ay, no sé, ¿esto está en el guión del programa? ¿Sr. Director?
-Positivo…
-Bueno, ¿dónde me siento?
-Al lado del invitado, tonta…
-Oquéi, pero no me digas tonta…
-¡No empecemos, tengamos la fiesta en paz!
-¡Al final siempre la boluda soy yo!
-Patricia…
-Señor Director, ¿lo puedo ayudar en algo desde acá?
-No, por contrato el que le da los sopapos al equipo soy yo.
-Sentate sino el jefe te surte, mami. No lo hagas bajar, haceme caso…
-Ese un día me las paga.
-Quedate acá, haceme caso, dale que ya empieza…

En el próximo episodio:
El Comfer, acompañado por las fuerzas del orden intenta interrumpir la emisión de “Calígula” un martes a las tres de la tarde. Castrillo destruye el panel de control de transmisión imposibilitando el corte y sube con una pataleante srta. Miccio en su mano a la antena de canal 13. Helicópteros de la prensa registran las imágenes y Pucarás armados con mísiles sobrevuelan el lugar de los hechos para disuadir al monstruo de su objetivo.

ESTO LO ENCONTRÓ UN FAN REVOLVIENDO EN LOS ARCHIVOS DE LA UBA. ¡CUÁNTOS RECUERDOS DE MI ÉPOCA DE ESTUDIANTE!

Tesis de finalización de la carrera de Antropología sobre la existencia de una pareja de Adanes y Evas de cada raza, cada una en un Edén diferente, porque si los ponían todos juntos, flor de bolonqui se armaba. Esto surgió porque ¿sino cómo iban a ser un Adán y Eva blancos y después tuvieron hijos de colores? Pensá un poco.

Primero, debemos localizarnos en el tiempo, unos 4500 años antes de Cristo. El lugar: no se sabe exactamente, pero era como si fuera Palermo, dividido en zonas con nombres ridículos, a saber:

Edén Ala Multiacción con un Toque de Vívere:
Según mis investigaciones de fósiles encontrados en excavaciones profundas, los Adán y Eva blancos vestían unas hojas de parra muy mononas y se la pasaban quejándose de todo, menos los fines de semana que armaban unos y se los fumaban en el country.

Edén Ghetto:
Los negros fueron los que primero descubrieron las propiedades relajantes del cannabis, el son de los tambores, y decían “maderfáquer” todo el tiempo, incluso lo escribían con aerosol en las cavernas con unas letras relocas.

Edén Pluma Sentada en el Trueno:
Los Adán y Eva indios fumaban unas pipas relocas, usaban atuendos vistosos y se guarecían en carpas, además de vivir de la caza, de la pesca y de la recolección de frutos (bueno, los otros también…)

Edén Chang:
Finalmente, se supone que los amarillos tendrían un mercado donde venderían manzanas del bien y del mal, pero medio podriderlis porque a la noche apagaban las heladeras. Comían el arroz del bien y del mal y tomaban un té verde del bien y del mal que los ponía de la cuca.

Fin de la tesis, a ver si nos ponemos las pilas con la nota porque sino mi viejo me corta los víveres.

Atentamente, SSS un joven Castrillo con una remera de Marley (Bob)

UNA HISTORIA DE AMOR

Me acuerdo que me llamó a eso de las ocho y media, como si fuera hoy. Hablaba como Graciela Borges masticando una babosa, así de sensual la voz. Empezó preguntándome cómo me llamaba y si me gustaba estar informado; le dije que sí, Eduardo. Una cosa llevó a la otra y acá nos ves, ella me llama todos los agostos; yo, que nunca me gustó Ámbito Financiero, ahora lo leo todos los santos días.

NENÉ

Ocho horas diarias de lunes a viernes, té con criollitas y un vidrio escupido. Siete años de atención al público te quitaron casi todo vestigio de humanidad, la buena humanidad y la otra.
No eras fea, Nené, cuando entraste. Con el tiempo vinieron las várices, el saco de lana con botones, el cigarro, los anteojos baratos, las mencionadas galletas secas. Y se fueron los chistes al pasar, las miradas a los ojos, las salidas con los compañeros y el sol.
Antes todavía hacías algún comentario lleno de envidia y amargura, ahora ni eso.
Nené, deseo más que nada en este mundo tener el poder de contar hasta tres y lograr que te despiertes siete años atrás y te olvides de todo. Quisiera que fuese ahora, mientras te acercás a mi escritorio arrastrando los pies y con esas carpetas bajo el brazo.

PORQUE HOY SE ME HACE

Silbó ese tango con alegría y bastantes trinos, gardelianos vibratos descendentes, pompa, jabón y musculosa. En el patio, los malvones se miraban entre sí como diciendo ¿y este?
Este se estaba lavando la camisa de salir. Giles…

A PARTIR DE HOY EL BLOG SALE EXCLUSIVAMENTE EN RUSO. ¡HOLA, HERMANOS DE SIBERIA, HOLA PANCHEROS DEL CIRCO VOSTOK, HOLA SR. GORBACHOV, HOLA LAIKA!

-Hola…
-Buenos días, señor; ¿en qué puedo ayudarle?
-Mirá, compré este PC Writer 2008 y no lo puedo instalar. Aparte está todo en ruso.
-¿Cuál es su nombre, señor?
-Castrillo, Rubén.
-Señor Castrillo, ¿cuál es su sistema operativo?
-¿Sistema…? A ver…
-Espero…
-Me tira que no tiene el Windors instalado.
-¿Cómo, señor?
-Sí, no sé…
-El PC Writer 2008 que usted adquirió es nuestro software que escribe novelas, ¿verdad?
-Sí, necesito unas vacaciones.
-Un momentito, voy a consultar que soy nueva acá…
Tárararará-rarára-clín-laraclín-laraclín, Tárararará-rarára-clín-laraclín-lararaclín, Lararaclín, lararaclín, lararaclín, lararaclín, tun-tun-tun-tun-tun-tun… Tárarararálarara--
-¿Señor? Gracias por esperar. Ya confirmé con nuestro equipo de técnicos, su PC no soporta nuestro programa. Puedo ofrecerle una alternativa.
-Decime…
-Tenemos un grupito de estudiantes de Letras, todos delgaditos y bajitos, ocupan poco espacio y no comen casi.
-Tipo unos jockeys…
-Sí, pero con barba y anteojos.
-Puede ser… ¿Cuándo me los mandás?
-Puede ser hoy mismo, señor. ¿Cuál es su dirección?
-Hotel Burj Al Arab, Dubai, cuarto 7002.
-Oquéi, hoy mismo se los enviaremos, y estarán a su disposición por treinta días o hasta que repare su PC.
-Gracias, nena.
-Faltaba más… ¿puedo ayudarl--
-No.
Tuuu-tuu-tuu-tuu…

-Se nos hizo, mami, en cuantito lleguen los disc-jockeys nos vamos a París.
-Va a ser maravilloso.
-Te amo…
Chuic, chuicshh, sluirppssss, juimm, sluprrr, larararararl…

¡VACACIONES!

Cinco destinos de ensueño para aprovechar lo que falta del verano si sos…

…un colombófilo:
Dirigite a Plaza de Mayo o casi cualquier lugar de Buenos Aires donde ciudadanos infradotados y sus crías le tiran migas a las colombas, que al final no tienen la culpa. Como sea, si ESO es lo que te gusta ver, comprate un paquete de maíz inflado Josesito y comételo VOS, sacá fotos y pasalo bien.
Recuerdos para traer: pis y caca de paloma, que es lo mismo. Alguna enfermedad pulmonar.

…uno que cree en duendes:
Armá la mochila con dos remeras de Marley, la carpa, bastante maría, hongos y un libro de Castañeda. Apuntale a Capilla del Monte y empezá a hacer dedo, un día llegás. Subite al Uritorco, ponete de la cuca y empezá a ver cosas, anotá todo y contáselo a tu tribu cuando vuelvas.
Recuerdos para traer: un monedero de piel de pene de burro cordobés, que debidamente estimulado se convierte en un práctico bolso de viaje así te lo llenás de hongos y maría para el viaje de vuelta. Un miembro de marciano disecado o un pedazo de su nave, o un collar con un aliencito de plomo y la inscripción “YO CREO”.


…un Campanelli:
Juntá a tu numerosa prole llena de mocos, a la patrona que hace diez años que no se depila, a tu víbora suegra, tu cuñado aprovechador, el pekinés grasiento ese, el loro que putea y los seamonkeys gays de Indonesia de tu hijo adolescente que se hizo emo, tergopoles, sombrillas y reposeras, meté todo en la chata y agarrá la 2 hasta Mardel. No te olvides el mate, los 7 de Oro, el alpiste, el Caladryl y la capelina. Playita Popular de 9 a 14, cola en Montecatini de 14 a 15, paseo por la peatonal de 16 a 19, feria hippie de 19 a 21.
Recuerdos para traer: una foca hecha con conchillas o un delfín idem. Muchos alfajores o esos postres asquerosos con mucho, mucho merengue, mucho dulce de leche y una nuez. Pulóveres y echarpes. Porquerías varias de Ferimar que comprarías en el Once por la mitad del precio. Tatuajes de henna o agua viva.

…un cazador de leyendas:
Andá a Tandil a investigar porqué se cayó la piedra movediza, entrevistá a ancianos que presenciaron el hecho en su niñez, aunque te cierren la puerta en la cara y vayan a buscar la escopeta, sacá fotos de donde estaba el cascote, de donde cayó y de todos los puntos intermedios. Formulá varios proyectos para ponerla de nuevo en su lugar y presentáselos al intendente; si no funciona, lleváselos a Bush, que seguro que se copa y te pide que le plantes una banderita.
Recuerdos para traer: salame tandilero, fragmentos de la Piedra Original ($5,00), perdigones en el culo.

…un primo lejano de los Anchorena:
Hacé cualquiera de los cuatro itinerarios, pero montado en una 4x4 con GPS y vestido con zapatitos náuticos, una chomba Lacoste a rashas y unos anteojos negros de 1500 mangos. Usá el pelito medio largo, medio asííí, levantate el flequishito y taaaaal, hablá medio asííí, sabééés, “qué calor Luliii, nos hubiésemos quedado en Puntaaa, esto está sheno de negros, Luliii…”
Preguntá siempre dónde queda el Tematick Resorth, pasate bastante bronceador en la nariz y no sueltes el celu ni un minuto, “cómo andááás Róbert, noooo, no estoy en Las Leñas, ¿qué te crés, que soy mishonario…?”
Recuerdos para traer: Un coshar que le compraste “a unos indiecitos remononos”; pediste tanto descuento que el pibe se ganó nada más que veinte centavos y se perdió media hora negociando con vos. “Y bueno, gordo, sho no inventé el capitalismo, las cosas son asííí, visteeem…”